A fines del año 2019, nos vimos obligados a adaptarnos rápidamente a una modalidad de enseñanza completamente nueva: las clases online. No estábamos preparados para esto, pero era solo el inicio de una serie de cambios que nos afectaría en los años siguientes, no solo en nuestro trabajo, sino también en nuestra forma de vida. En ese entonces, apenas sabíamos manejar plataformas de videoconferencia y, mucho menos, cómo planificar actividades que mantuvieran a nuestros estudiantes motivados y comprometidos en un ambiente virtual desconocido. Fue un proceso de aprendizaje constante, enfrentándonos a retos y buscando formas innovadoras de seguir entregando una educación de calidad.
Paulatinamente, desde el 2021 comenzamos a retomar lo que conocíamos como la normalidad y en el 2022, Duoc UC toma un nuevo desafío: la implementación de Blackboard Ultra, una versión mejorada de nuestro AVA. Luego de habernos familiarizado con la versión anterior y haber aprovechado sus potencialidades al máximo, comenzamos con una nueva plataforma que traía consigo múltiples oportunidades, también nuevos retos. Con tiempo y esfuerzo, logramos dominar sus funciones, viendo en cada actualización la oportunidad de mejorar nuestra práctica docente.
Estas dos realidades, la enseñanza online y el cambio en la plataforma, se unieron de manera significativa mediante en una serie de capacitaciones sobre Enseñanza y Aprendizaje Digital, dictado por Blackboard Academy. Este programa se componía de tres cursos, cada uno de dos meses de duración: Fundamentos en la Enseñanza y Aprendizaje Digital, para identificar los elementos esenciales de un curso a distancia; Diseño de la Enseñanza y Aprendizaje Digital, enfocado en la creación de cursos en un entorno virtual desde cero; y Excelencia en la Enseñanza y Aprendizaje Digital, que se centraba en la evaluación y mejora de cursos en línea. Como asesor en Tecnología Educativa de la Unidad de Apoyo Tecnológico (UAP), tuve la oportunidad de participar en estos cursos, reflexionando sobre cómo nuestra práctica docente puede adaptarse para ser efectiva en entornos virtuales.
Aunque actualmente solo imparto clases presenciales, el aprendizaje logrado en estas capacitaciones ha sido un gran aporte para mi labor. En primer lugar, me ha ayudado a buscar formas más efectivas de presentar los contenidos en el Aula Virtual de Aprendizaje (AVA). Aunque la estructura general de nuestros cursos es establecida de manera centralizada, siempre hay espacios para mejorar y personalizar, ya sea en la forma o en el contenido, con el objetivo de ofrecer la mejor experiencia posible a nuestros estudiantes. Además, las reflexiones constantes durante las sesiones, orientadas a la enseñanza online, me llevaron a cuestionar mis prácticas presenciales y buscar maneras de mejorarlas, aprovechando los mismos recursos que ya utilizo.
Uno de los aprendizajes más valiosos de esta capacitación ha sido la importancia de la evaluación constante, tanto en la creación como en la implementación de un curso. La retroalimentación, tanto de pares como de estudiantes, proporciona información crucial para mejorar futuras versiones del curso. Este proceso de evaluación también es fundamental en la enseñanza presencial: no todas las actividades o metodologías producen los resultados esperados, y solo a través de la reflexión crítica y la apertura a comentarios podemos mejorar. Además, cada curso tiene una realidad única, por lo que debemos adaptar nuestras estrategias a las características y necesidades específicas de cada grupo.
El aporte de estas capacitaciones también ha tenido un impacto positivo en mi rol de asesor UAP en Tecnologías Educativas. Por un lado, el tener la posibilidad de utilizar la plataforma Blackboard Ultra para la creación de cursos online de modo experimental, permite adquirir una soltura que es fundamental al momento de acompañar a los docentes que requieren asesorías, no tan solo respondiendo sus dudas puntuales, sino también mostrando nuevas formas de poder abordar sus dificultades, mejorando así la experiencia de los docentes con la plataforma. Además, desde una perspectiva educativa, los contenidos aprendidos permiten mirar las problemáticas que puedan tener los docentes y cómo se resuelven a través del acompañamiento tecnológico, enriqueciendo las actividades, de modo que resulten motivadoras para nuestros estudiantes.
Estoy muy agradecido con la institución por brindarme la oportunidad de participar en esta capacitación, volver a estudiar siempre representa un desafío, pero en la docencia, estos desafíos son necesarios. Necesitamos trabajar en la mejora continua, no solo en la disciplina que enseñamos, sino también en las metodologías que utilizamos. Cada instancia de formación es una oportunidad para crecer, y debemos aprovecharlas al máximo.
Carolina Peña Parraguez
Felicitaciones Luis!!! Un honor compartir un equipo contigo