Contextualización
Las transformaciones experimentadas por la educación superior en el siglo XXI antes las demandas de un contexto social y productivo en constante evolución, mediado por los avances en la tecnología, tendencias macroeconómicas fluctuantes y por la regulación progresivamente más precisa sobre el medioambiente y la justicia social (Foro Económico Mundial, 2023), han llevado a la necesidad de formar técnicos y profesionales con un capital de competencias significativamente diferente al tradicionalmente esperado, lo que ha dejado en evidencia la necesidad urgente de transformar las metodologías de aprendizaje y enseñanza tradicionales que se utilizan en el aula hacia enfoques centrados en el/la estudiante.
En este contexto, el Foro Económico Mundial (2023) ha identificado que las competencias más requeridas en el mundo del trabajo están siendo el pensamiento analítico, pensamiento creativo, resolución de problemas complejos, autoeficacia (en específico resiliencia, flexibilidad y agilidad), motivación y autoconciencia, curiosidad y aprendizaje a lo largo de la vida, alfabetización digital, atención al detalle, empatía y escucha activa, control de calidad, liderazgo e influencia social. Esto no significa que las competencias asociadas a conceptos, procedimientos y actitudes disciplinarias no sigan siendo relevantes. La agenda educativa 2030 de la Unesco pone como uno de los grandes bloques de competencias a desarrollar a las vinculadas con alfabetizaciones fundamentales: Lenguaje y comunicación, ciencias, tecnología, ingeniería, arte, matemática y finanzas, entre otras (Opertti, 2017). Sin embargo, en un contexto disciplinar, social y laboral en constante evolución como el actual, se vuelve más difícil prever qué contenidos y destrezas formar y cuál será su nivel de obsolescencia en el mediano plazo. En este sentido, el Foro Económico Mundial (2016) proyecta que alrededor del 65% de los niños y niñas que ingresaron a la educación formal en los últimos 8 años, al integrarse al mundo del trabajo se desempeñarán en puestos que en la actualidad no existen y sobre los cuales no es posible estimar cuáles serán sus características y requerimientos.
En específico se estima que, en el corto plazo, al menos el 44% de los/las trabajadores/as activos/as se encontrarán con la realidad de que sus competencias técnicas y profesionales, si no son actualizadas o transformadas, no les permitirán desarrollar de forma exitosa sus trabajos (Foro Económico Mundial, 2023). Junto con esto, se proyecta la eliminación de 83 millones de puestos de trabajo existentes y la creación de 69 millones de puestos nuevos a nivel mundial, en respuesta a procesos de automatización y digitalización, adopción de la inteligencia artificial y machine learning e incorporación de procesos productivos más especializados conducentes al logro de la sostenibilidad medioambiental, económica, social y política (Foro Económico Mundial, 2023).
Entonces, ¿cómo aseguramos que quienes egresen de la educación superior en este momento histórico puedan emplearse de forma efectiva, eficiente y pertinente? A través de la formación de competencias cognitivas, socioemocionales y actitudinales que permitan a las personas hacerse cargo de su propio desarrollo y adaptarse rápidamente a los desafíos del contexto actual. Y estas competencias no se desarrollan de forma receptiva, con un/a docente traspasando sus conocimientos y experiencias a sus estudiantes (como se concebía tradicionalmente el proceso de aprendizaje y enseñanza), sino a través de la construcción activa y relacional del aprendizaje, en un currículo que se organiza en torno a metas de desarrollo éticas, inclusivas y enriquecedoras para el individuo que lo recorre y la sociedad en su conjunto (Walker, 2012).
Y es aquí donde las estrategias metodológicas activas centradas en el/la estudiante se vuelven protagonistas, emergiendo como una respuesta efectiva al contexto recién descrito. Estas estrategias, respaldadas por investigaciones pedagógicas, buscan maximizar el aprendizaje significativo mediante la participación activa de estudiantes en el proceso de construcción del conocimiento (Marzano, Pickering & Pollock, 2001).
El Modelo Educativo de Duoc UC ha promovido la incorporación de estas estrategias metodológicas activas como parte esencial de su diseño curricular e instruccional. A través de un enfoque sistemático y estructurado, basado en el modelo de capabilities, busca garantizar que los/as estudiantes no solo adquieran conocimientos teóricos, sino que también desarrollen competencias complejas aplicables a su futuro profesional. En tres ejes de desarrollo (Docentes de excelencia comprometidas/os con la formación, formación y evaluación centradas en resultados de aprendizaje y experiencias de aprendizaje diversas con metodologías contextualizadas, activas y significativas) pone al/la estudiante como centro de todo el proceso de formación y dirige sus esfuerzos y recursos a la construcción activa de aprendizajes de calidad.
En este marco, durante 2024, la Subdirección de Diseño Instruccional perteneciente a la Dirección de Desarrollo de Programas de la Vicerrectoría Académica, ha publicado el documento “Estrategias Metodológicas Centradas en el/la Estudiante Duoc UC” (Duoc UC, 2024), que busca orientar a la comunidad educativa en el desarrollo y la implementación de estrategias activas de aprendizaje. A continuación, se presentan sus principales definiciones.
Definición y características de las estrategias metodológicas activas.
Las estrategias metodológicas activas son aquellas que colocan al/la estudiante en el centro del proceso de enseñanza y aprendizaje y lo hacen responsable de este, con un/a docente que asume un rol de mediador/a y facilitador/a. A diferencia de los enfoques tradicionales en los que el/la docente actúa como transmisor/a de conocimiento, estas estrategias se basan en la concepción de que el aprendizaje es un proceso constructivo relacional, no receptivo (Universidad Alberto Hurtado, 2024; Joubert, 2019) donde el/la estudiante se convierte en un agente activo que interactúa con otros/as y el contenido, realiza tareas significativas, reflexiona sobre lo que está aprendiendo y construye su propio aprendizaje. Se involucra en un aprendizaje activo, donde realiza actividades y piensa sobre ellas, poniendo práctica sus habilidades cognitivas de orden superior (Brame, 2016) y construyendo significados.
El valor de estas estrategias reside entonces en su capacidad para involucrar a los/as estudiantes de manera más profunda en experiencias de aprendizaje y evaluaciones auténticas y complejas, favoreciendo la retención profunda y significativa del conocimiento y su transferencia a distintas realidades y contextos (Universidad Alberto Hurtado, 2014; Joubert, 2019; Felder y Brent, 2009). Según Joubert (2019) investigaciones evidencian que las estrategias metodológicas activas son el doble más efectivas que las estrategias de carácter receptivo para el logro de la comprensión del contenido en ciencias, ingeniería, matemáticas y tecnología; y para la disminución significativa de la brecha de logro en estudiantes con rendimiento académico descendido y estudiantes de primera generación en la educación superior.
En el contexto del desarrollo instruccional de Duoc UC, se denominan estrategias (y no metodologías o técnicas) ya que el concepto estrategia comprende el despliegue intencionado y articulado de métodos, técnicas, procedimientos y recursos, que deben ser implementados en una secuencia ordenada y planificada, y que se seleccionan de acuerdo con los resultados de aprendizaje a lograr, para el abordaje “estratégico” de los desafíos del proceso de enseñanza aprendizaje.
Estas estrategias se implementan de manera intencionada y planificada, seleccionándose de acuerdo con los resultados de aprendizaje esperados para cada asignatura o nivel educativo. Pueden contemplar desde acciones simples de interacción y reflexión, hasta situaciones complejas de desarrollo (Brame, 2016). Las experiencias de aprendizaje diseñadas bajo este enfoque consideran la heterogeneidad de los perfiles estudiantiles, buscando ser contextualizadas, activas y significativas, en relación con las necesidades del entorno profesional, ver Figura 1.
Figura 1: Características de las experiencias de aprendizaje.
Finalmente, es importante destacar que no todas las estrategias metodológicas funcionan para todos los desafíos de aprendizaje, por lo que se requiere un acercamiento ponderado y estructurado de todos los actores involucrados para su selección, diseño, desarrollo e implementación.
Categorías de estrategias metodológicas.
Para Duoc UC, las estrategias metodológicas activas pueden clasificarse en tres categorías principales según su nivel de implementación en el currículo: Macrocurriculares, mesocurriculares y microcurriculares. Es importante señalar que una misma estrategia metodológica puede categorizarse como macro, meso y/o micro, dependiendo del propósito que cumple y por el que fue seleccionada para un plan de estudio o asignatura, este se puede apreciar de mejor manera en la tabla 1.
- Estrategias macrocurriculares: Corresponden a aquellas estrategias metodológicas que se implementan para dar forma a una carrera, programa o certificación, la cual es diseñada en base a la estrategia. Su incorporación debe definirse en el diseño del Mapa Formativo de una carrera o programa, ya que dará la identidad a esta y sus diferentes actividades curriculares.
- Estrategias mesocurriculares: Corresponden a aquellas estrategias metodológicas que se implementan en el diseño de una línea formativa o asignatura completa, con el propósito de que todos o casi todos sus Resultados de Aprendizaje (RA) se desarrollen en base a ellas. Su incorporación se define durante el diseño del Mapa Formativo de una carrera o programa o a nivel del diseño microcurricular según corresponda.
- Estrategias microcurriculares: Corresponden a aquellas estrategias metodológicas de carácter más acotado, que se implementan en una Experiencia de Aprendizaje (EA) para asegurar el logro de un RA o uno o más Indicadores de Logro (IL). Se definen a nivel del Plan de Maleta Didáctica y pueden complementar, profundizar o precisar el alcance de la o las estrategias mesocurriculares definidas para la asignatura.
Tabla 1: Listado de estrategias metodológicas.
ESTRATEGIAS | MACRO CURRICULARES | MESO CURRICULARES | MICRO CURRICULARES | |
Se desarrolla a nivel de carrera y se define en el Mapa Formativo. | Se desarrolla a nivel de toda la asignatura y se define en el Mapa Formativo y/o en el Plan de Maleta Didáctica. | Se desarrolla a nivel de nivel de Experiencia de Aprendizaje y se define en el Plan de Maleta Didáctica. | ||
1 | Análisis de Casos | • | • | |
2 | Análisis de Dilemas Éticos | • | ||
3 | Aprendizaje Basado en Equipos (TBL) | • | • | |
4 | Aprendizaje Basado en Investigación | • | • | |
5 | Aprendizaje Basado en Problemas (ABP) | • | • | • |
6 | Aprendizaje Basado en Proyectos (ABPro) | • | • | • |
7 | Aprendizaje Basado en Retos/ Aprendizaje Colaborativo Basado en Desafíos (ACBD) | • | • | |
8 | Aprendizaje inmersivo | • | ||
9 | Aprendizaje más Servicio (A+S) | • | • | |
10 | Aprendizaje práctico basado en retroalimentación remota | • | ||
11 | Aula Invertida (Flipped Classroom) | • | • | |
12 | Bootcamp/ Programas de Inmersión | • | • | |
13 | COIL (Aprendizaje Colaborativo Online Internacional) | • | • | • |
14 | Debate/Panel de Discusión/Foros de Discusión | • | ||
15 | Demostración/Ejecución Dirigida | • | ||
16 | Design Thinking (Pensamiento de Diseño) | • | ||
17 | Exposición Dialogada | • | ||
18 | Gamificación | • | • | |
19 | Juego de Roles (Role Playing) | • | ||
20 | Organizadores Mentales | • | ||
21 | Portafolio | • | ||
22 | Salidas a Terreno | • | ||
23 | Seminario | • | • | |
24 | Simulación | • | • | |
25 | Storytelling | • | ||
26 | Uso de contenido interactivo | • |
Fuente: Dirección de Desarrollo de Programas
La definición y caracterización de estas estrategias metodológicas activas puede ser revisada en el documento “Estrategias Metodológicas Centradas en el/la Estudiante Duoc UC” (Duoc UC, 2024).
Para la construcción del documento guía señalado, se han seleccionado las estrategias de la tabla 1 desde un conjunto más extenso disponible y se les ha asignado una estructura y significado para la institución, porque son las que mejor responden a los desafíos del Modelo Educativo de Duoc y del proceso CAPE institucional: El desarrollo de capacidades y competencias en procesos centrados en el/la estudiante y su aprendizaje; el desarrollo del conocimiento disciplinar de forma práctica y aplicada; el desarrollo de parte de la capacidad de aprender a lo largo de la vida y adaptarse a los cambios; el desarrollo en los/as estudiantes de la noción de su valor como persona única, irrepetible; y el desarrollo de la capacidad de cuidar la vida en sociedad, el valor del otro, el sentido de comunidad y el trabajo colaborativo. Mediante estas estrategias metodológicas es posible intencionar estas prioridades en la comunidad educativa Duoc, aunando los esfuerzos en pos del desarrollo integral e intencionado de estudiantes y egresados.
Junto con esto, las estrategias seleccionadas presentan un nivel de complejidad y profundidad, que permite el desarrollo de diversas técnicas asociadas y la construcción de experiencias de aprendizaje profundas, significativas y situadas, de manera planificada y estructurada. Para que tengan éxito, sin embargo, no solo dependen de docentes y estudiantes, sino de los esfuerzos sistemáticos de la comunidad educativa en su conjunto. Esto implica implementar procesos efectivos de capacitación docente en servicio, la creación de ambientes de aprendizaje flexibles y dinámicos que permitan la participación activa del estudiante y el desarrollo de procesos de diseño curricular e instruccional focalizados en el/la estudiante y su aprendizaje.
Conclusiones
Las estrategias metodológicas activas ofrecen un enfoque transformador en la Educación Superior, al colocar al/la estudiante como protagonista del proceso de aprendizaje. A través de la implementación de estrategias activas como el Aprendizaje Basado en Proyectos, el Estudio de Casos, la Simulación, el Aprendizaje Colaborativo Basado en Desafíos (ACBD), el Aula Invertida y la Gamificación, entre otras, se logra una mayor implicación de los/las estudiantes, lo que se traduce en un desempeño y en el desarrollo de competencias profesionales clave para el contexto social y productivo actual.
Para que estas estrategias sean efectivas, es fundamental que se adapten a las particularidades del contexto educativo y que se implementen de manera planificada y estructurada. Esto implica no solo una adecuada capacitación docente, sino también la creación de ambientes de aprendizaje flexibles y dinámicos que permitan la participación activa del estudiante.
En conclusión, la adopción de estrategias metodológicas activas en la educación superior no solo mejora el proceso de enseñanza-aprendizaje, sino que también prepara a los/las estudiantes para enfrentar los desafíos de un mundo profesional en constante cambio.
Bibliografía
Brame, C. (2016). Active learning. Vanderbilt University Center for Teaching. Disponible en: https://cft.vanderbilt.edu/active-learning/
Duoc UC (2024). Estrategias Metodológicas Centradas en el/la Estudiante Duoc UC.
Felder, R. M., & Brent, R. (2009). Active learning: An introduction. ASQ Higher Education Brief, 2(4).
Foro Económico Mundial (2023). The future of jobs report 2023. Disponible en: https://www3.weforum.org/docs/WEF_Future_of_Jobs_2023.pdf
Foro Económico Mundial (2016). New Vision for Education: Fostering Social and Emotional Learning through Technology. Disponible en: https://www3.weforum.org/docs/WEF_New_Vision_for_Education.pdf
Joubert, S. (2019). The benefits of active learning in higher education. Disponible en: https://graduate.northeastern.edu/resources/active-learning-higher-education/#:~:text=Morris%20notes%20that%20there%20are,to%20increase%20course%20completion%20rates
Marzano, R. J., Pickering, D. J., & Pollock, J. E. (2001). Classroom Instruction That Works: Research-Based Strategies for Increasing Student Achievement. Association for Supervision and Curriculum Development.
Opertti, R. (2017). 15 Claves de Análisis para Apuntalar la Agenda Educativa 2030. Reflexiones en curso Nº14 sobre Cuestiones fundamentales y actuales del currículo, el aprendizaje y la evaluación. Disponible en: https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000259069_spa
Universidad Alberto Hurtado (2024). Metodologías activas de enseñanza y aprendizaje. Disponible en: https://docencia.uahurtado.cl/wp-content/uploads/2024/08/6.2-Metodologi%CC%81as-activas-de-ensen%CC%83anza-y-aprendizaje.pdf
Walker, M. (2012). Universities and a Human Development Ethics: a capabilities approach to curriculum. European Journal of Education, 47 (3), 448 – 461.
0