Acelerar los procesos respecto a la digitalización ha sido uno de los grandes desafíos que hemos tenido que asumir a consecuencia de la pandemia. Los tiempos actuales cambiaron, y tanto en el ámbito personal como profesional, la tecnología ha pasado a ser nuestra mejor aliada.
Estos cambios se han evidenciado a nivel de hardware y software, y hoy tenemos acceso a un sinfín de alternativas que dan respuesta a las necesidades académicas de docentes y estudiantes, incluso en aparatos móviles de gama baja – media. Me atrevería a decir que, hasta antes de la pandemia, nuestros estudiantes de la Escuela de Administración y Negocios se apoyaban en el uso de la tecnología a un nivel más bien básico y no con la misma exigencia como la requerida por un alumno/a de Informática o Diseño Gráfico, por ejemplo, donde usan programas más complejos con hardware más específicos y potentes.
Hoy las demandas tecnológicas para nuestras carreras son otras. Tanto es así que hace dos años atrás si algún alumno de nuestra escuela hubiese pedido ayuda o asesoría a la hora de adquirir un computador, lo más seguro es que se le hubiese recomendado un PC o Notebook que respondiera al concepto “Ofimática”, es decir, “que corra algunos programas de Office y algunas páginas web sencillas”. En un lenguaje informático, hubiesen recomendado como mínimo algún equipo con sistema operativo Windows o Mac, que tuviese un procesador Intel i5, con 8 GB RAM y con disco de almacenamiento SSD.
Pero llegó la pandemia. Lo anterior cambió y la actual situación llegó para quedarse. Nuestros alumnos empezaron a usar programas que demandaban mayores recursos y ahora en un día normal, trabajan con sus computadores corriendo en promedio 10 pestañas de un navegador web: plataformas académicas como AVA y Blackboard Collaborate; tablas de Excel, documentos Word y presentaciones en Power Point; más programas de mensajería y video llamadas instantánea como Microsoft Teams, Google Meet y Zoom, entre otros. Por tanto, en lo técnico, se requieren equipos con mayor capacidad que puedan correr todos estos programas abiertos al mismo tiempo más una muy buena conexión a internet, y en lo disciplinar en esta era digital, una mayor colaboración pues gracias a la Internet y los avances tecnológicos, se pueden compartir documentos en tiempo real y trabajarlos entre varias personas a la vez.
El reconocido concepto de “Cloud” o nube donde se alojan los documentos o trabajos compartidos y que además permite tener la información respaldada en todo momento, entregando así un grado de mayor seguridad a la hora de hacer sus trabajos. Sin duda todos tuvimos que aprender.
Y es que en estos tres últimos semestres nos tuvimos que adaptar a una modalidad 100% remota. Sin duda un gran desafío, que no hubiese sido posible sortear sin el compromiso de parte de directivos, docentes y estudiantes. Nos dejamos de ver físicamente y nos acostumbramos a las pantallas o a los iconos y a coordinarnos a través de distintas plataformas.
¿Cómo impactan estos cambios en la formación de nuestros alumnos?
Claramente es una ayuda, eso no se puede negar, pero hay que saber aprovecharla. Tenemos el agrado de señalar que todas nuestras carreras de Administración y Negocios cuentan con una asignatura muy importante: Herramientas Tecnológicas, donde justamente se enseña todo lo que he mencionado.
Además, no podemos estar ajenos a lo que pasa en la industria donde en el futuro se desempeñarán nuestros titulados. Actualmente existen empresas que han adoptado el teletrabajo como una opción real. Tenemos ejemplos como los de la empresa Ripley o Sky Airlines, donde sus trabajadores están 100% bajo esta modalidad, teniendo que ir una vez al mes a sus oficinas para seguir generando lazos de camaradería con sus pares.
Es por esto que nuestros estudiantes deben estar preparados, ser conocedores del uso correcto de la tecnología y adquirir además esas competencias blandas que le permitirán, por ejemplo, mantener la atención de sus receptores tal como lo pudiesen hacer en presencialidad.
¿Están preparados nuestros alumnos frente a estos cambios tecnológicos?
Absolutamente. Confío plenamente en el trabajo de todos nuestros docentes quienes también se han adaptado en tiempo récord a los cambios, fortaleciendo sus propias competencias relacionadas a la era digital, y transmitiendo sus conocimientos y experiencias a todos nuestros alumnos, con la calidad que los caracteriza.
Lo que como equipo de la Escuela de Administración y Negocios de Sede San Carlos de Apoquindo nos deja muy tranquilos. Es un trabajo colaborativo donde todos hemos aprendido sobre estas herramientas tecnológicas que sin duda fortalecen aún más la formación integral que brinda Duoc UC a nuestros alumnos. Lo que nos hace sentir muy satisfechos y orgullosos.
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