25 de Septiembre, 2017

Buenas prácticas que mejoran la retención de estudiantes en la educación superior.

Equipo Editorial Observatorio

Equipo Editorial Observatorio

3 minutos de lectura

Desde la década de los setenta del siglo pasado, algunas instituciones de educación superior del hemisferio norte[1] comenzaron a realizar estudios que desencadenaron propuestas de políticas institucionales que apuntaron a mejorar la retención estudiantil y a disminuir el retiro de estudiantes del sistema. De tal modo que hoy tenemos insumos teóricos y ciertos modelos explicativos que nos permiten sustentar y creer en ciertas “buenas prácticas” que nos orientarían a disminuir la deserción.

Si observamos experiencias internacionales sobre el tema de retención podemos sintetizar que las instituciones que trabajan con estudiantes vulnerables y que tienen los mejores resultados en el mundo, enfatizan como acciones y actitudes recomendables las siguientes:

1) Toda su actividad institucional pone al estudiante como el centro de su quehacer.

2) Los líderes de las instituciones siempre están pendientes del comportamiento académico y de los problemas económicos que presentan sus estudiantes más vulnerables. 

3) Poseen administrativos y profesionales capacitados y actualizados para enfrentar los problemas que presentan los estudiantes.

4) La retención de los estudiantes y lograr su titulación son objetivos prioritarios y los indicadores de éxito para medir la eficacia y la calidad de la institución educativa.

5) Mantienen algún tipo de relación estable con las instituciones secundarias de donde provienen sus estudiantes vulnerables. Saben de qué instituciones vienen y del estado académico en que llegan sus estudiantes.

6) Registran por unidad y luego centralmente toda la información que informa cada estudiante al momento de retirarse de la institución. Luego de eso la analizan, obtiene conclusiones y diseñan políticas para enfrentar hacia el futuro el problema de la deserción. Valoran mucho tanto la evidencia cualitativa como cuantitativa para la toma de decisiones.

7) Saben que lo sustancial para la implementación de una estrategia efectiva de prevención de la deserción es informar a la comunidad educativa sobre este problema, de cuál es su magnitud y a quienes está afectando.

8) La deserción es un fenómeno que mayoritariamente se produce durante el primer año y disminuye porcentualmente en los siguientes años.

9) Preocuparse por la retención no es poner el acento solo en el grupo que está en vías de desertar, significa también y sobre todo, el cuidar a todos los estudiantes. Por lo tanto, toda la institución es la que se moviliza para aumentar y estabilizar la retención de estudiantes.

Es importante detectar que las iniciativas internacionales de retención más exitosas son aquellas estrategias que son más flexibles para una población crecientemente diversa. Además, que las iniciativas son focalizadas y fruto de investigaciones internas respecto de sus estudiantes. También que las iniciativas con mejores resultados contemplan esfuerzos en varias dimensiones y un mayor compromiso de los responsables directos de la docencia. En definitiva, se enfrentan causas académicas, económicas, culturales y sicológicas de manera armónica y simultánea y se hace un seguimiento de los estudiantes más vulnerables para la detección e implementación de protocolos denominados “alertas tempranas”.

 [1] Syracuse University, Boston College, University of Florida, UCLA, UCDAVIS, Texas A&M, Southwest Texas Junior College y Trinity Valley Community College, entre otras.

Deja tu comentario

Nombre y Apellido *

Guardar mi nombre y email en este navegador para la próxima vez que desee comentar.

0 comentarios

Otros artículos de interés

NAVEGAR LA EDITORIAL

8 de Septiembre, 2025

Hacer norma lo que ya funciona: Duoc UC entre la ESTP y las empresas.

La distancia entre formación y empresa se reduce cuando se decide, sin titubeos, que el lugar natural del aprendizaje técnico-profesional es la intersección entre aula, taller y operación real. Esa decisión no es retórica: requiere gobernanza, estándares, maestros de la industria, datos y una cultura interna que mida por resultados de aprendizaje y empleabilidad. El […]

31 de Agosto, 2025

Cuando la institución se reconoce en sus estudiantes: oficio, técnica, profesionalismo, evidencia y porvenir común.

Toda institución educativa se explica, de verdad, cuando lo que dice de sí misma coincide con lo que sus estudiantes viven a diario. No basta con declarar propósitos nobles: hay que construir un ecosistema que los haga verificables. Cuando una organización asume esa exigencia, convierte su misión en una arquitectura de condiciones: tiempos que alcanzan, […]

25 de Agosto, 2025

Lo que permanece y lo que cambia en la formación Técnico-Profesional

En un tiempo acelerado y a ratos brumoso provocado por el avance de la IA, la Educación Técnico-Profesional necesita avanzar con brújula, no con prisa. El tránsito debe distinguir con rigor lo que permanece: el núcleo ético que legitima el quehacer formativo y su promesa de movilidad y dignidad; de lo que cambia: las herramientas, […]