El Proyecto Educativo de Duoc UC le confiere hoy día al docente el “rol de maestro”, el que a lo largo del ejercicio de la docencia no solo es un mero transmisor de conocimiento, sino que es un modelo a seguir; él tiene la autoridad para ser un referente de valores transversales, que vayan en pos del desarrollo de una formación vinculada estrechamente a lo integral del individuo. Es por esto que requieren de una formación y capacitación constante, a través de la adquisición de herramientas y conocimientos formativos para ejercer una docencia de calidad.
¿Qué se entiende por calidad? El docente debe ser capaz de distinguir entre aprendizaje superficial y aprendizaje profundo. El enfoque superficial nace de la intención de liberarse de la tarea con el más mínimo esfuerzo. Se utilizan tareas de bajo nivel cognitivo. Mientras que el enfoque profundo tiene que ver con la reinterpretación, comprensión, conexión y aplicación de conocimientos, utilizando habilidades de orden superior (Biggs 2006).
Por otro lado, el docente no solo debe encauzar al estudiante a través de la línea del saber profundo, sino que también lo debe hacer a través de la línea del ser. Nuestro Proyecto señala que el objetivo es formar a personas íntegras, por lo que la educación de los alumnos (as) busca desarrollar al máximo sus potencialidades. Para llevar a cabo esta misión, es importante crear “Comunidades de Aprendizaje”, que estén orientadas a la construcción de aprendizajes significativos y de calidad.
Para la construcción de Comunidades de Aprendizaje se necesita a docentes que más allá de estar altamente calificados, estén comprometidos con la Misión de Duoc UC. Esto podría llevarse a cabo a través de la organización de grupos de trabajo que tengan un objetivo en común: educarse a sí mismos en el marco de un esfuerzo cooperativo, donde se dialogue a partir de sus experiencias y vivencias en la docencia. Así, podremos consolidar fortalezas, y transformar las debilidades en oportunidades de mejora.
De este modo, a través de estas Comunidades, el aprendizaje cooperativo cobra fuerza y sentido, pues no basta con pensar uno mismo sobre su práctica docente, sino que también es necesario, generar espacios de discusión para que, después del ejercicio del pensamiento metacognitivo -el que va muy de la mano con la autorregulación- se cree la instancia de corregulación de la práctica docente. El propósito finalmente de espacios colaborativos de aprendizaje es que, como docentes no seamos solo meros transmisores de conocimientos, sino que, además de enseñar habilidades referidas a una disciplina, logremos que los estudiantes puedan transferirlas y aplicarlas desde una tarea a otra.
Tomando en cuenta esta mirada, la sede Maipú, implementó el año 2017 un espacio de reflexión continua, destinado a toda la Comunidad, con el objeto de establecer el diálogo permanente. Así es entonces como se crea el “El Centro de Perfeccionamiento y Desarrollo”, un lugar orientado a la conformación y desarrollo de Comunidades de Aprendizaje, focalizado en un interés común: el perfeccionamiento docente a partir de un trabajo colaborativo entre pares.
Al entrar a la sala de Perfeccionamiento y Desarrollo, el lugar habla por sí solo, pues todo allí tiene un sentido. Los colores, el mobiliario y su distribución, denotan un espacio que más allá de tener un objetivo concreto y específico, tiene depositada una ilusión, un anhelo, que se respira y se percibe. Es lo que señala el Proyecto Educativo respecto al significado que le otorga al concepto de “Comunidad Educativa”: “El ambiente formativo de Duoc UC permite la vivencia de una experiencia educativa en la que el acto del diálogo y relación favorece el desarrollo de habilidades y conocimientos, y el crecimiento de los valores de todos los miembros de la comunidad” (P.E, 2017: 20)
El Centro de Perfeccionamiento y Desarrollo de sede Maipú desarrolla e implementa las siguientes acciones durante el año:
a) Espacio de encuentro y de reuniones de los diferentes equipos de trabajo, las cuales tienen por finalidad informar, analizar, discutir las gestión de los procesos, con el objeto de tomar decisiones e implementar acciones.
b) Lugar de encuentro entre docentes de la misma área disciplinar, para reflexionar sobre su práctica docente, retroalimentar vivencias, compartir experiencias en el marco de las “buenas prácticas”.
c) Talleres de formación profesional y personal:
–Rol Docente en Duoc UC: Instancia que permitió reflexionar sobre las características que tiene el docente Duoc y de cómo estas se articulan en nuestra práctica docente.
–Taller AVA: Espacio de aprendizaje que significó la adquisición de herramientas tecnológicas para utilizar de manera más efectiva la plataforma, así como también el diseño de pruebas online.
–Taller para padres: Conversatorio que tiene por finalidad, entregar orientaciones y una mirada más global sobre la tarea de educar.
Como Unidad de Apoyo Pedagógico, utilizamos este espacio permanentemente como un lugar de encuentro entre el docente y el asesor. Nos reunimos aquí, por primera vez, para iniciar el Programa de Acompañamiento Docente (PAD).
El primer encuentro es la reunión de vinculación, una de las etapas más significativas del PAD, puesto que nos permite conocer al docente, en cuanto a su experiencia, expectativas, motivaciones para ejercer la docencia. La idea es generar confianza y cercanía para poder desarrollar una relación horizontal, de trabajo colaborativo y constructivo. En este sentido, la sala de perfeccionamiento y desarrollo promueve el desarrollo de un clima de intimidad y diálogo entre docente y asesor.
El segundo encuentro de diálogo y reflexión entre docente y asesor es la retroalimentación. Debe entenderse por esta como “un espacio para fomentar la reflexión en torno a la práctica y que esto beneficie el proceso educativo, para que en definitiva nuestros estudiantes aprendan mejor. Supone que la retroalimentación se refiera a las conductas, eventos, acciones y reacciones que ocurren en el aula, y en particular, aquellas que fueron identificadas como indicadores del desempeño docente en sus distintas dimensiones.” (MIDE UC. 2018)
En este sentido, para que la retroalimentación resulte efectiva, es importante considerar como eje articulador para la reflexión los siguientes aspectos:
Sobre el contexto:
-Planificar con cuidado y formalidad.
-Disponer de un momento y lugar apropiado.
-Disponer de los materiales necesarios para un trabajo colaborativo.
Sobre la relación establecida:
-Utilizar un lenguaje claro, explícito y con foco en lo positivo.
-Planear la entrevista como una instancia formativa y de mutuo aprendizaje.
-El protagonista de la entrevista es el docente observado, por lo que es muy importante que el entrevistador no “se tome la palabra”, y que procure dejar mucho espacio para la reflexión en conjunto.
Sobre el contenido de la entrevista:
-Dejar en claro el propósito del encuentro como un ejercicio reflexivo.
-Centrarse en las acciones observables, no en rasgos personales.
-Toda afirmación debe basarse en evidencia, no en opiniones.
-Más que juicios, plantear hipótesis abiertas para discutir.
-Muy importante que el foco de la entrevista no se pierda: reflexionar en torno a sus acciones del docente observadas y su efecto en el aprendizaje de los estudiantes.
Sobre la estructura de la entrevista:
-Tener preparada una síntesis de lo observado, con foco en lo positivo.
-Al interior de cada dimensión, comenzar por los aspectos positivamente evaluados, para continuar con los desafíos.
-Al término de la entrevista, dejar un momento para tomar acuerdos.” (MIDE UC. 2018).
Por último, la importancia de la conformación de comunidades de aprendizaje radica en que nos da la oportunidad de pensar más allá de nuestra propia práctica docente, pues nos invita a implementar espacios de reflexión continua, establecer un diálogo en común en el cómo aprenden los estudiantes y qué es lo que aprenden. También, en nuestro rol de profesores, nos invita a mirarnos y analizarnos, agudizando el foco en las estrategias metodológicas que utilizamos, en el clima que desarrollamos y en la manera en la que nos comunicamos con el otro. ¿Somos realmente facilitadores del aprendizaje? Los espacios de reflexión continua nos permiten poder dialogar en torno a esta interrogante, para luego, proponer estrategias de mejora a la docencia que propicien un aprendizaje de calidad para nuestros alumnos. Ya tenemos claro que nuestro rol trasciende lo disciplinar, y nos sitúa, como lo dije en un principio, en una posición donde tenemos gran desafío por delante. Nuestro compromiso es con la sociedad y aportar para el bien común.
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