Desde mediados de marzo estamos viviendo en un permanente estado de desafío y enseñanza. La pandemia nos puso a prueba, sin previo aviso: De un día para otro tuvimos que trasladar todo el semestre académico a una plataforma web y comenzamos a naturalizar que el contacto cotidiano fuera solo a través de una pantalla.
Pese a los obstáculos evidentes que significa migrar un modelo análogo a uno virtual, sacamos la tarea adelante. Estamos finalizando el primer semestre con un 94% de clases realizadas y con un 78% de asistencia. Además, estamos muy orgullosos de obtener un 86% de satisfacción en la “Encuesta de Clases Remotas”.
Lo anterior habla del excelente trabajo docente y de la motivación de los profesores en sus clases. Y, además, del buen trabajo previo generado por la Unidad de Apoyo Pedagógico (UAP), que en las primeras semanas de marzo realizó diversas acciones para los académicos, las que fueron claves para obtener las cifras ya mencionadas.
Frente a esta inesperada contingencia sanitaria, en pocos días tuvimos que migrar el 100% de nuestros servicios a un formato virtual. Creamos un correo de consultas que a principios de agosto ya cuenta con más de 1.500 solicitudes realizadas, y generamos dos canales telefónicos, uno de “atención virtual inmediata” y otro de “apoyo tecnológico a distancia”, los que buscan resolver las dudas de nuestra comunidad estudiantil.
Así como en el servicio de atención, en el plano académico también tratamos de mantener a nuestros docentes en un permanente estado de actualización y motivación. Es así como se abordó la novena versión de la Jornada de Especialización Docente (JED), una actividad hito para la sede Viña del Mar, donde se invita a toda la comunidad académica a reflexionar en torno a una temática que responda a los tiempos actuales.
En esta ocasión, la JED quiso centrar los esfuerzos en cómo mantener un vínculo estrecho con los estudiantes, a pesar de lejanía física. “Aprender a distancia, enseñar con cercanía”, fue el lema de una actividad que contó con la participación de docentes, administrativos e invitados, y que en cinco días sumó más de 1.700 visualizaciones en YouTube.
Los focos estuvieron puestos en 1) Resignificar la vivencia, comprendiendo esta situación como una oportunidad de aprendizaje para rol docente; 2) Comprender la tarea de los educadores en la virtualidad; y 3) Valorar el ecosistema digital para el logro de aprendizajes significativos.
Para profundizar en este tema, dos expertos expusieron su análisis. Por una parte, la mexicana Claudia López, directora regional de los Centros para el Desarrollo Docente y la Innovación Educativa de la Región Norte del Tecnológico de Monterrey y, por otro lado, Daniel Halpern, académico de la Universidad Católica, director del think tank Tren Digital e Investigador de EducomLab. Ambos nos entregaron una valiosa mirada sobre los desafíos para abordar las clases desde el punto de vista de la virtualidad.
Así como las clases han migrado a un formato online, las actividades de extensión y vinculación con el medio también han encontrado un nuevo espacio de difusión. Durante el primer semestre, pudimos contabilizar 25 actividades, todas bajo la modalidad virtual, lo que representa una oportunidad para ampliar la exposición más allá del centro geográfico de la sede Viña del Mar.
Para este segundo semestre se llevarán a cabo dos actividades de vinculación con el medio que se han transformado en hito para nuestra sede: Pasarela Valparaíso de la carrera de Diseño de Vestuario y los Ciclos Teatrales de la carrera de Actuación. Con las sabidas restricciones sanitarias por las que atraviesa el mundo, los equipos de trabajo están definiendo la modalidad y el formato para presentar estos eventos.
Si bien actualmente la Sede se encuentra cerrada, estamos preparados para el día de mañana abrir la reja que nos devuelva, con todas las medidas de seguridad implementadas, a nuestra querida sede Viña del Mar. La institución cuenta con un protocolo sanitario y la Sede ha sido debidamente señalizada para cuidar la salud de cada uno de nosotros.
No quisiera dejar pasar la gran oportunidad para agradecer el gran esfuerzo que están realizando administrativos y docentes desde sus casas. Sin el compromiso de cada integrante de la comunidad de la sede Viña del Mar los resultados de esta primera mitad del año no habrían sido tan positivos. Con el empuje de todos, hemos demostrado que la lejanía física no es un impedimento para hacer bien las cosas. A distancia, también se puede.
0