Es usual escuchar y leer tres aseveraciones: La sociedad se ha vuelto líquida y carece de sentido de vida; el medio ambiente no se está comportando como siempre; la ciencia y tecnología mejora el bienestar humano, pero también es una amenaza para las personas.
Respecto a qué pasa con las personas como para que se piense que el mundo carece de sentido, se han dado diversas respuestas. Entre la más conocida está la del sociólogo Zygmunt Bauman que lo denominaría “modernidad líquida” para aludir a un estado de permanente cambio, sin valores sólidos y estables, y que esta situación ha debilitado los vínculos entre las personas dado que las nuevas generaciones no adhieren a lo antiguo, sean ideologías, posturas religiosas y visiones antropológicas de larga data. Se busca de nuevo y con cierta desesperación y confusión, respuestas a las preguntas de siempre: de dónde venimos, qué hacemos y hacia dónde vamos.
Duoc UC a estas preguntas tiene su respuesta y que se encuentra en su más profunda identidad cristiana y, en un escenario de alta complejidad mundial y de carencia de certezas, propone su visión antropológica e invita con alegría a estar abiertos a la trascendencia, a Cristo, extendida a toda persona de buena voluntad.
En relación con el medio ambiente existe la certeza y evidencia que a la naturaleza la estamos dañando y que las siguientes generaciones pueden encontrarse con un hábitat hostil y que, de no tomar pronto medidas, este hecho puede poner en serio riesgo la permanencia de la especie humana y de todo ser vivo. En tal sentido, el Papa Francisco en su encíclica “Laudato Si” ha implorado a toda la humanidad a que cuidemos nuestra “Casa Común” y volvamos a vivir en armonía con la naturaleza, teniendo siempre presente que ambos nos necesitamos para mantener la existencia de la vida en el planeta tierra.
La ciencia y tecnología desde hace siglos y fruto de la inteligencia y esfuerzo humano ha venido mejorando sustantivamente el bienestar material de todas las sociedades. Es notorio que vivimos más, que hemos disminuido las causas y permanencia del dolor físico, que aumenta nuestra productividad con numerosas maquinarias y nuevos equipos, que exploramos otros planetas, que tenemos tecnología diversa en nuestros hogares y que esta ha hecho más agradable la vida de hogar, que podemos acceder al conocimiento universal y a nuevas relaciones personales desde nuestro equipo y conexión a internet, etcétera. Pero también existe el peligro que su uso no adecuado y su avance sin ética aplicada, puede traernos problemas de gran impacto como un supra control ejercido por el poder (público o privado), el término de oficios y profesiones de larga data, el deseo de algunos de mejorar artificialmente la especie humana o de crear androides que pueden desafiar a la antropología y la relación estable entre estos y las personas, o el de crear armas de destrucción administradas por máquinas en extremo inteligentes y respecto de las cuales se puede perder el control, etcétera.
Todo lo anterior y de manera simultánea provoca efectos no solo en Chile sino en todos los países. Basta ver los medios de comunicación, las redes sociales, los nuevos libros e investigaciones de los últimos 30 años para observar que los temas aludidos y de manera creciente son los que poseen más interés en las personas y han surgido diversas posiciones, respuestas y adherencias a una “multiplicidad de verdades” creándose las llamadas “doctrinas de los puntos de vistas” sobre los temas aludidos y que han generado una creciente confusión, sello propio de una nueva época ad portas.
También una institución técnico profesional tiene mucho que decir y hacer en estos tres escenarios. Duoc UC tiene como propósito formar personas para una sociedad mejor. Pero para que se construya el mundo que consideramos mejor, para la personas parece ser relevante abordar estos tres escenarios, como de hecho ya lo está haciendo con el despliegue de su nuevo Plan de Desarrollo 2021-2025 y su creciente estímulo y fortalecimiento de aspectos esenciales de nuestra identidad como lo son su antropología cristiana, su apertura creciente a la comunidad con más actividades y vínculos, el desafío de preparar a los estudiantes con una alta empleabilidad para un mundo tecnologizado, al estar abierta a recibir los medios tecnológicos más actualizados vigentes y estar muy atentos a las necesidades y nuevos requerimientos que provienen desde la sociedad, porque Duoc UC ha estado y estará siempre al servicio de Chile.
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