3 de Enero, 2023

Algunas reflexiones y nuestra tarea de siempre.

Equipo Editorial Observatorio

Equipo Editorial Observatorio

4 minutos de lectura

Al terminar un año siempre se inicia una doble reflexión: la primera es examinar los hitos, los aprendizajes obtenidos, las fortalezas mejoradas y las debilidades manifestadas; por otro lado, se examinan las tareas pendientes, los desafíos del presente año y se acuerdan estrategias y tácticas para iniciar un camino que resulte al final con el éxito por todos esperado.

El fin de un año y el comienzo de otro es un simple acuerdo consensuado de manera mundial. Esta separación nos permite clasificar y estructurar tareas organizacionales institucionales como las personales. Nos ayuda a que el cerebro está condicionado por el contexto y la historia para entender que termina algo y comienza otra etapa, aunque la separación sea simplemente intelectual y plenamente humana. Somos los únicos mamíferos que creemos racionalmente en esta creación artificial y que nos permite ordenar muchas acciones de la vida de las instituciones y las personas.

El 2022 fue el primer año completo desde el 2019 que toda la actividad educativa volvió a la más completa presencialidad. Académicos(as), administrativos(as) y estudiantes tuvieron un régimen de estudio tal como se experimentaba desde el 2019 hacia atrás. Renovamos nuestra gregariedad y surgió una rica vida cotidiana manifestada en la participación en numerosas actividades académicas o de diversión organizadas por muchas personas. Retornó la integral vida humana con toda su sociabilidad y el contacto con otros y otras.

Las instituciones y las personas tuvieron que soportar 2 años intensos a lo que nos llevó el COVID-19. Aunque hoy la Pandemia continúa, las personas están pudiendo convivir con ella. Las vacunas han sido una aliada relevante para disminuir el número de fallecimientos y de contagios. Sin embargo, también existen efectos colaterales y no médicos fruto de estos años y es el aprender a volver a la normalidad. Se trata de renovar nuestra convivencia con otros y otras de manera presencial; a esforzarnos por mejorar nuestros aprendizajes y recuperar los no logrados en años anteriores; a seguir avanzando en capacitaciones para saber utilizar todos los avances tecnológicos en el ámbito educativo formal; el atender a nuestra salud mental y el acompañarnos y crecer con otros y otras. Todo lo anterior son efectos y tareas pendientes que nos dejó la Pandemia y que aún están en desarrollo.

La Educación Técnico Profesional en los últimos 40 años ha avanzado en consolidar su perfil e identidad. Ha logrado posicionarse como una alternativa de estudios legítima en el ámbito de la educación superior. No ha sido fácil, pero crece. Y entre las pruebas de su credibilidad y aceptación social es que en los últimos 10 años su matrícula de inicio supera a la universitaria; sus títulos cada día más cuentan con aprobación otorgada por el mercado laboral; se la reconoce como distinta y complementaria a la formación universitaria y que no compite con esta; es el ámbito de estudios que más penetra en los sectores socioeconómicos más necesitados de una formación que les dé a estos más empleabilidad futura; desde sus orígenes propone una oferta de estudios muy anclada a las necesidades más inmediatas y prácticas de las empresas; han aumentado su infraestructura y su equipamiento para responder a la formación académica y laboral que hoy se requiere y, caminan decisivamente a convertirse en instituciones que pueden aportar más innovación, investigación aplicada a nuestro país.

Para un 2023 que se observa con altas exigencias y desafíos para Chile, la ETP debe continuar aportando para el desarrollo presente y futuro de nuestro país. Los nuevos estudiantes que llegarán nos demandan ser una institución de calidad que los ayude a aumentar sus esperanzas futuras de lograr una formación integral y un título que les permita la mejor empleabilidad posible de lograr. Cada uno de estos al matricularse confía en Duoc UC, y la institución sabe que tiene académicos y administrativos que saben que deben responder con todas sus capacidades y competencias a esta confianza. Finalmente, esta es nuestra última y principal tarea: Entregar lo mejor de la institución hacia nuestros actuales y futuros estudiantes.

Deja tu comentario

Nombre y Apellido *

Guardar mi nombre y email en este navegador para la próxima vez que desee comentar.

0 comentarios

Otros artículos de interés

NAVEGAR LA EDITORIAL

18 de Noviembre, 2024

Inspiración, innovación y compromiso en los 56 años de Duoc UC

La conmemoración de los 56 años de Duoc UC, celebrada con solemnidad el miércoles 13 de noviembre, marca un momento clave para reflexionar sobre el pasado, el presente y el futuro de nuestra institución.  El acto de conmemoración de los 56 años de vida institucional de Duoc UC tuvo lugar en el piso 15 del […]

11 de Noviembre, 2024

Duoc UC: Un legado de excelencia y compromiso desde 1968 hasta 2024

Desde su fundación el 16 de noviembre de 1968, Duoc UC ha forjado una trayectoria marcada por hitos significativos que reflejan nuestro compromiso con la Educación Técnico Profesional en Chile. A lo largo de más de cinco décadas, hemos enfrentado desafíos, adaptándonos a los cambios y consolidando nuestra posición como una institución de excelencia. Hoy, […]

4 de Noviembre, 2024

La capacitación laboral en la era de la innovación tecnológica

Vivimos años caracterizados por significativos avances científicos y tecnológicos sin precedentes, situando la capacitación de los colaboradores en una encrucijada crucial. La rápida aparición de nuevas tecnologías y conocimientos obliga a las empresas e individuos a adaptarse continuamente para mantener su competitividad y relevancia en el mercado laboral. Esta realidad nos lleva a preguntarnos: ¿Cómo […]