Hoy en día hemos visto cómo la juventud se encuentra en un estado carente de sentido, de un propósito de la vida en general, pero al mismo tiempo son muy apasionados y comprometidos cuando una idea les hace sentido y atrae su interés. Lo anterior se ha visto acrecentado, sin lugar a duda, con los acontecimientos que a todos nos han desafiado y planteado nuevas interrogantes, estallido social, Pandemia y la crisis económica.
A nosotros como Institución, ese propósito en la vida nos lo da la fe y la profunda convicción de que no vamos solos, vamos de la mano de Dios y de una comunidad que nos sostiene, guía y nos marca la hoja de ruta para navegar en la realidad que nos toca vivir.